1. HISTORIA MILENARIA: El cannabis ha sido utilizado por diversas culturas desde hace más de 5,000 años, tanto para fines medicinales como espirituales, destacando su importancia en la medicina tradicional china y en rituales hindúes.
2. TERPENOS Y AROMATERAPIA: Los terpenos, compuestos aromáticos presentes en el cannabis, no solo aportan sus característicos olores, sino que también influyen en sus efectos terapéuticos, siendo utilizados en la aromaterapia para mejorar el bienestar.
3. FITORREMEDIACIÓN NATURAL: El cannabis es una planta poderosa para la fitorremediación, es decir, puede limpiar suelos contaminados de metales pesados y otras toxinas, demostrando su potencial para la sostenibilidad ambiental.
4. POTENCIAL EN LA NEUROGÉNESIS: Estudios recientes sugieren que algunos cannabinoides pueden promover la neurogénesis, el proceso de formación de nuevas neuronas, abriendo puertas a tratamientos innovadores para trastornos neurodegenerativos.
5. VARIEDADES DINÁMICAS: Existen más de 700 cepas conocidas de cannabis, cada una con perfiles únicos de cannabinoides y terpenos, lo que permite una personalización precisa en su uso medicinal y recreativo, adaptándose a las necesidades específicas de cada usuario.
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